Review SmackDown Live 25 de septiembre de 2018

Review del show de esta semana de SmackDown Live

Review SmackDown Live 25 de septiembre de 2018

Sergio Esteban

27/09/2018 a las 22:30

Promo inicial.

Surrealista segmento que cumple con su función de entretener, además de programar una lucha que no resultaba excesivamente interesante, pero ya tenía algo en juego. R-Truth es un hombre muy experimentado, desenvuelto al micro y con capacidades más que probadas para hacer reir. Es el personaje ideal para elevar a otros y resultar gracioso, a la par que interesante. El show que se inventó fue dinámico, mantuvo al público expectante y, aunque el contenido era nulo, hizo reir con sus bailes y sus momentos graciosos. Es alguien atrayente que sabe entretener y se toma en serio cualquier tontería, dándole una importancia que mejora el global del segmento.

También me pareció correcta la actuación de Carmella, en un discreto segundo plano, pero aportando cosas. Eso si, creo que su potencial es superior y verla relegada a este gimmick, puede venirle muy bien para realizar la transición a face, pero le va a quitar buena parte del protagonismo que ha tenido este año. Habrá que adaptarse tanto a su nueva imagen, con un llamativo cambio de color de pelo, como a su nueva personalidad, aunque tampoco está muy claro hacia donde se dirige su futuro una vez que termine su alianza con el rapero.

Daniel Bryan no estuvo mal, pero tampoco bien. Simplemente aportó su carisma como babyface para apoyar a Truth y provocar a Miz, sin mayores pretensiones. Sus risas me parecieron algo forzadas en algún momento, pero no era su momento el opener de este show. Y Mizanin, pues sigue instalado en su clásica versatilidad, capaz de dar buenas luchas, buenas promos, ser un aspirante convincente a un título o pelear por cosas sin sentido como el hecho de recuperar su espacio semanal en el show, recuperando el programa que le había usurpado R-Truth. Haga lo que haga transmite intensidad y emoción. Y eso es lo que importa, porque heels así son los que consiguen un mayor interés de los fans.

R-Truth vs. The Miz.

Buen combate, con un control alterno de ambos y buenas reacciones del respetable. Hubo algo de discontinuidad, ya que las transiciones no fueron demasiado fluidas, pero en conjunto fue una buena lucha, con dominio de Truth cuando le ponía intensidad a su performance y momentos en los que Miz tenía la situación bajo control, mediante patadas y secuencias que impedían la reacción del face. No hicieron nada novedoso, pero las ejecuciones fueron limpias y se contrarrestaron bien el estilo espectacular de Killings con la solidez y la sobriedad de The Miz, que usaba trampas cuando podía, aunque sin recurrir a ellas en exceso. Carmella también aportó en ringside como mánager, aunque sin ser decisiva y Bryan estaba en comentarios observando a su rival del number one contender australiano.

Al final, un desenlace made in WWE, con una victoria para el favorito, muy correcta y necesaria para reforzar su papel, pero con un toque ilegal tras el piquete de ojos que no vió el árbitro. Para ser un villano, no estuvo mal que consiguiese el triunfo de esa manera, entre abucheos de la gente y provocando a Daniel utilizando su finisher. Contra él si que tendrá que rendir a un nivel superior en el Show-Down, ya que ahí se juegan bastante más que el recuperar un segmento de SmackDown. R-Truth no queda mal tampoco, ya que su función es la de poner over a sus enemigos y darles relevancia, por lo que todas las reacciones positivas que obtuvo se transformaron contra Mizanin en el momento de su victoria, consiguiendo el efecto deseado. Este run como veterano sin pretensiones le está viniendo muy bien para apuntalar su conexión con la grada y, como los viejos rockeros que nunca mueren, aún mantiene parte de su esencia y es capaz de dar secuencias interesantes a la altura de las nuevas generaciones. Merece un aplauso este hombre.

Big E vs. Sheamus.

Combate divertido, aunque con algunos fallos, que sirve para reforzar aún más a The Bar como retadores a los títulos por parejas de SD. A la victoria de la semana pasada de Cesaro sobre Kofi, se une esta de Sheamus sobre Big E, lo cual transmite la idea de que los europeos están sobradamente preparados para aspirar a esos cinturones, al menos por lo que hemos visto en matches individuales. En este de esta semana, el irlandés comenzó con fuerza, un estilo duro y mostrándose dominante hasta que Big E, entre bromas, gestos y movimientos divertidos, llevó la contienda a su terreno igualando las fuerzas. A partir de ahí un toma y daca interesante, con un estilo powerhouse bastante marcado, pero que carecía de la velocidad y el ritmo que suelen darle a los combates los wrestlers que en esta ocasión se encontraban en los aledaños del ring.

Esa lentitud en ciertos momentos o falta de fluidez fue el mayor hándicap de la pelea, pero no por ello fue mala, sino que las comparaciones en ocasiones no son positivas. Al final, triunfo claro y contundente de Sheamus, con su finisher, de manera legal y luciendo de un modo imponente. Big E no queda muy mal, ya que estuvo a la altura de su enemigo, pero fue derrotado de una forma evidente ante un luchador muy solvente, por lo que el bookeo obviamente es mucho más favorable a los heels. Tras ello, una celebración con Cesaro y nuevo aviso de que buscan los cinturones de forma seria, pasando de las bromas y tonterías de New Day, que volvieron a ser notorias en los minutos previos al match que se disputó, con trombones, tortitas, hashtags y demás historias que parecieron no gustar a Cesaro y Sheamus, unos guerreros que solo pretenden luchar. 

Promo de Aiden English, Rusev y Lana.

La promo es buena y la reacción de la gente pareció bastante positiva, pero no me acabó de convencer lo que ví. Aiden English fue el absoluto protagonista, interrumpiendo a Rusev y llevándose todo el foco del segmento. Su protagonismo es merecido, ya que como el dijo en su intervención (aunque fuera sobre kayfabe), realmente ha sido una parte fundamental en el proceso del crecimiento de Rusev Day como movimiento de masas. Su argumentación me parece bastante face, porque está dolido y lucha por un amigo, mostrándole que la mala en realidad es su esposa. Sus intenciones no son oscuras, sino recuperar el esplendor perdido, pero en base a la amistad que le unía al búlgaro.

Sin embargo, el hecho de usar el truco sucio de su vida personal y una posible relación extramatrimonial me pareció un poco zafio. Entiendo que se enreden en una telenovela de este estilo y que en el amor y la guerra todo vale. Incluso que esto bien utilizado puede generar hype en gran parte de la audiencia, tratando de descubrir que esconde Lana. Pero me pareció un giro argumental poco creíble y algo forzado. Aún así, siembra dudas, posiciona a la rusa en el foco indirectamente y permite a Aiden mostrar que, al micro, fuera de sus presentaciones histriónicas, también se maneja de buena manera, siendo capaz de convencer en la forma del discurso, aunque en el fondo, como digo, la historia se queda un pelín coja. Aún queda mucho por recorrer en esta storyline y llegará el momento en el que Rusev se canse de ser un muñeco con el que juegan los demás. De hecho, esperaba una reacción más furibunda contra English anoche, ya fuera por el ataque de la semana pasada o por meterse con su mujer. Pero no.

Asuka y Naomi vs. Sonya Deville y Mandy Rose.

Nuevo capítulo de la amistad entre Naomi y Asuka que se convierte en el enésimo segmento del mismo estilo. Un combate de menos de cinco minutos de duración en el que la heel o heels de turno dominan a la japonesa, ya sea sola o en compañía, hasta que en la fase final las chicas buenas se recuperan y consiguen el triunfo con facilidad. Las rudas son variables, dependiendo de quien interese más en cada ocasión, pero el esquema a seguir es similar. Además, la presencia de Naomi hace la lucha todavía más previsible. La mujer de Jimmy Uso se mostró muy superior cuando obtuvo el relevo, bastante sobrada también en actitud, con un estilo chulo afroamericano que no se corresponde con su nivel in-ring, donde se la ve algo pesada y lejos de la fluidez que tenía anteriormente. No es que haya sido nunca una virtuosa en la lona, pero parecía que le costaba moverse, con el dinamismo de siempre, más de lo normal.

De todos modos, consiguió junto a la Emperatriz un triunfo obvio, ya que tienen más status que cualquier pareja a la que se enfrenten en el midcard de SmackDown. Sus victorias les vienen bien para mantener la posición, pero tampoco las elevan en demasía, a la espera de una derrota en Australia frente a las Ilconics o una ruptura de su alianza que permita crecer a una de las dos si realiza un turn heel. En cuanto a las antiguas componentes de Absolution, pues hicieron el mismo papel que Peyton y Billie. Es decir, momentos de control, algún destello, pero derrota contundente, esta vez con una doble patada de las faces. Merecerían más, pero al igual que las australianas, parecen condenadas a poner over a otras estrellas que necesiten rivales en la zona media de la cartelera.

Shinsuke Nakamura vs. Tye Dillinger.

Buen combate de Dillinger, aunque muy corto, en el que consiguió lucirse y atraer la atención del público, demostrando que puede conseguir un lugar fijo en el midcard para aportar cosas al show azul. No me gustó que la lucha no fuera por el campeonato, ya que aunque es cierto que Tye no había hecho demasiados méritos para tal oportunidad, creo que si Nakamura hubiera expuesto su título lo hubiera retenido de todos modos y hubiera reforzado su reinado con una defensa. Aún así, sin nada en juego, el Perfect Ten atacó como si no hubiera un mañana, aprovechando la oportunidad que tenía ante sí de gran manera. Tras el auge inicial del face, el nipón se recompuso y en base a su característica ofensiva recuperó el control de la lucha, pero de nuevo, un inspirado Tye volvió a hacerse con las riendas del combate, pareciendo incluso que podía ganar en ciertos instantes.

Una actuación muy correcta y que no terminó con una derrota clara para él, como cabría esperar. Es cierto que el ataque de Orton fue letal y lo usó como un muñeco, dejándolo maltrecho y sin capacidad de reacción, pero al menos lució bien en los minutos de los que dispuso y se vió inmerso en la historia por el título de Estados Unidos, lo cual no es una mala noticia para él. Sin embargo, para el japonés no fue una noche demasiado brillante. No ya por la derrota, que es algo circunstancial, ya que Randy atacó a su enemigo otorgándole la derrota al nipón, por tanto, sino por la sensación de no ser nunca el protagonista de su segmento y hasta parecer que necesita la ayuda de Orton para acabar triunfante. No llevó el control de la mayoría del combate frente a un Dillinger teóricamente muy inferior a él y, además de perder, el foco fue casi totalmente para The Viper por su despiadada intervención. 

Orton es mucho más atractivo que él en este momento y, aunque enreden la historia porque ambos son heels, probablemente Shinsuke sea la siguiente víctima en el camino de destrucción de Randy. Un buen entretenimiento, un reforzamiento de la imagen de Orton y una victoria (extraña y dolorosa, pero victoria) de Tye tras lucir bien en el enfrentamiento. La única pega es la situación de Nakamura, aunque realmente también puede verse como un hombre inteligente que siempre se salvaguarda ante cualquier peligro y evita las situaciones complicadas, atacando cuando lo tiene todo a su favor como en el post-match. Postura inteligente, pero pobre para un campeón que necesita más protagonismo.

Becky Lynch vs. Lana.

Parece que el turn de Becky Lynch no está tan próximo como parecía por actuaciones de semanas previas en las que dejaba una puerta abierta a que se produjera. Primero atacó en un set de fotografía a traición a Charlotte, lo cual no deja de ser una actitud completamente ruda de hacer las cosas. Y después aparentó como si fuera la dueña del show, interfiriendo en una promo de Rusev y Lana para decirle a la rusa que debía enfrentarse a ella. El carácter de Lynch es el que le está llevando a estar donde está, pero sigue pareciéndome muy lejano a lo que debería ser por reacción popular. En cuanto a la pelea, pues bastante olvidable. Lana intentó algún que otro ataque y sorprendió en un principio a la campeona, pero al final fue claramente dominada y sometida por Becky.

Esta victoria no supone un gran logro para la irlandesa, pero la mantiene activa y refuerza más su carácter que sus impresiones sobre el ring. El status de Lana no es muy grande y un triunfo contundente ante la rusa era algo predecible. Respecto a la propia Lana, nunca tuvo opciones reales de hacer frente a su oponente y, aunque se mostró combativa, parecía obvio que caería con la facilidad con la que lo hizo. No estuvo demasiado mal para lo que suele ser habitual en ella, aunque tampoco fuera algo digno de reseñar. Al menos, los cinco minutos de performance se hicieron llevaderos y se vió algo decente. Un relleno que se supone que no irá a más, con una Becky centrada en la órbita titular y una Lana que bastantes frentes abiertos tiene ya con su marido y las amenazas de Aiden English de desvelar oscuros secretos de su pasado.

Promo de AJ Styles y Samoa Joe.

Buen segmento, pero al que le sigue faltando algo para subir de nivel y conseguir transmitir la brutalidad que se desea. AJ Styles está bien en su papel, tratando de acudir a su trabajo sin pensar en nada, haciendo lo que le manda Paige y siendo el chico bueno. Quizás le falta un punto más de locura cuando ve que Samoa, por la fuerza, quiere entrar en su territorio e invadir lo que es suyo. Lógicamente pone intensidad para demostrar que ese hecho le afecta y le duele, pero al no terminar de producirse el ataque de Joe, siempre parecen amagos que impiden que Styles enloquezca en toda su expresión contra el samoano.

Joe, mientras tanto, juega con él y demuestra ser un heel muy eficiente, capaz de acongojar únicamente con un móvil y hablando en un tono normal. Es muy convincente y creíble en su papel de perturbado pero con un punto de cordura, para saber hasta donde puede llegar. No obstante, al igual que a AJ, a sus actuaciones le faltan evolucionar hasta el extremo. Cuando las historias se cuecen a fuego lento y van funcionando me gustan, pero a la vez siempre existe el riesgo de dejar escapar este momento clave y que cuando se produzca el ansiado ataque ya no surta el mismo efecto que produciría hoy en día. Quizás se esté haciendo un pelín largo este momento de la rivalidad y Wendy tenga que implicarse más o haber un factor desestabilizante nuevo.

Lo bueno es que mantienen el interés de la mayor parte de la audiencia y, bueno, que han llevado al título de WWE a cerrar un show de SD, lo cual visto lo visto es un mérito en los últimos tiempos. Curioso también me pareció el proceder de Paige, que exigió a Styles que estuviera para la firma y que no rompiera la mesa, ni hiciera nada extraño, dejando que Joe ni se presentase al show y estuviese en casa de Styles provocándolo. Muy coherente no es, por mucho que sea necesario para que se puedan ir dando los eventos que han escrito los guionistas.

Nota del show: 5

PUBLICIDAD

No te olvides de visitar Solowrestling, la web con todas las noticias de WWE. Síguenos en redes sociales, Facebook, Youtube, Twitter e Instagram.

Recuerda que el próximo evento premium de WWE es WWE Backlash y en Solowrestling estarás al día de todas las noticias relacionadas.

Temas relacionados:

PUBLICIDAD