Review Monday Night Raw 20 de agosto de 2018

Promo inicial.

Pasó Summerslam y parece que también el momento de apoyo de la grada a Roman Reigns. El público, en general, estaba cansado del reinado plagado de ausencias de Lesnar y circunstancialmente, parecieron apoyar a Roman el domingo, en una coronación muy bien recibida. Pero volviendo al día a día, a la realidad común, la aparición de Reigns con el cinturón en Raw volvió a generar más abucheos que vítores. Hubo reacciones de todo tipo, pero la mayoría fueron contra el nuevo poseedor del título, que fue insultado en la mayoría de su discurso, excepto en el momento en el que nombró a Bálor como retador ante el cual defender por primera vez el campeonato Universal. Esos aplausos no fueron obviamente para él, sino para el irlandés, ya que es un luchador muy valorado por los espectadores.

Difícil encontrar a un heel del calibre de Lesnar para mantener en una posición teórica de face querido al samoano. Strowman, Rollins, Lashley, Bálor y Ambrose, parecerían las alternativas más o menos lógicas y todos tienen un mayor favor de la audiencia que él, en mayor o menor medida. Su promo no fue mala, pero más que el contenido y su capacidad comunicativa dejó que el público se expresase, lo cual era coherente estando en un instante así, en un Raw post-Summerslam. En cuanto a Finn, aprovechó el arrastre de la situación, se posicionó como una alternativa agradable para los fans, pero no se veía con la suficiente capacidad como para derrotar al campeón. Un buen segmento coronado con el abucheo generalizado a Corbin que, con suerte, sobre kayfabe, acabó teniendo éxito en la noche al ser el sustituto oficial de Angle como GM y poder manejar a su antojo los hilos del show rojo a partir de la próxima semana.

Bobby Lashley vs. Baron Corbin.

Sobre Baron Corbin giró gran parte del show. Y es que durante la noche consiguió, tras varios segmentos en backstage en desacuerdo con Kurt, ganarse la confianza de Steph y hacer que la señora McMahon, tras ser golpeada en el segmento de Ronda, le diera los galones de Raw, en venganza por ser atacada y que Angle no hiciera nada para defenderla. Como personaje, Corbin ha evolucionado mucho y genera odios de acuerdo a la exposición que tiene, pero en el ring, no consigue representar la misma amenaza ni de lejos. Tras su actuación lamentable en Summerslam, anoche volvió a caer ante Lashley, de manera clara y contundente. Es cierto que la duración del combate fue aceptable y que Bobby es un luchador poderoso sobre kayfabe, pero Baron no termina de cuajar grandes actuaciones sobre el cuadrilátero y suele ser derrotado de forma continua impidiendo que su personaje despegue definitivamente.

En la primera parte de la pelea fue controlado completamente por Lashley, dejando una sensación clara de inferioridad, aunque se recuperó y tomó las riendas de la lucha hacia la fase intermedia. No obstante, eso fue un espejismo y sus ataques no hicieron mella en un Lashley que cuando se puso serio venció de forma bastante sólida al alguacil. La historia de Corbin se juega más en despachos que sobre la arena y a partir de ahora, con un mayor poder, probablemente tenga ventajas, pero deberían cuidar también su status como wrestler. En cuanto a Lashley, una victoria que no le sirve de mucho más que para tenerlo activo. Parece en un limbo en el que una semana luce imponente y otra ni aparece en el PPV. Tendría que tener unos planes más claros porque parece que la historia con Elias terminó y se le ve perdido. Ganando, pero sin rumbo fijo.

Sasha Banks, Bayley y Ember Moon vs. Riott Squad (Ruby Riott, Sarah Logan y Liv Morgan).

Bookeo difícil de entender, tanto de la lucha como de la storyline entre Sasha y Bayley que es el atractivo principal de todo esto. Por empezar con la pelea, comprendo que las faces pierdan el combate, ya que hay que potenciar a las heels y alargar la rivalidad, pero lo que no entiendo tanto es el desarrollo de la contienda. Para proteger a Sasha, Bayley y Ember, se les dió una gran performance. Ellas llevaron el peso total de la lucha, con agresividad, movimientos combinados, saltos llamativos, spots contundentes y relevos agónicos en los que no recibían daño, pero en los que la luchadora que entraba mostraba una fortaleza tremenda. Bayley estuvo medianamente bien, Moon mejor y Sasha se mostraba dominante. Para protegerlas está muy bien, pero sin apenas recibir castigo, ser vencidas con facilidad y de forma limpia, resulta bastante ilógico.

Riott Squad ganaron sin ser demasiado protagonistas ni ser muy amenazantes. Encima, la cuenta fue para Banks, que estaba siendo la más autosuficiente de todas las wrestlers en liza. Por otro lado, tenemos la historia de Bayley y Sasha, que vuelve a sufrir otro parón. Las chicas que siempre parecen importantes y acaban por enésima vez en una rivalidad de transición contra unas heels aceptables, pero que no son tan importantes como para postergar su enfrentamiento de nuevo. Y estos retrasos acaban por generar situaciones esperpénticas para mujeres de tanta calidad, como perder en un combate múltiple en el preshow del evento más importante del año o no aparecer ni siquiera en la cartelera del segundo.

Promo de Triple H.

Segmento completamente fuera de lugar para promocionar un show que tendrá lugar dentro de unas semanas. HHH, un hombre que tiene un gran atractivo al micro, pero sin repercusión en ninguna storyline del Raw actual, hablando de un icono como Undertaker, prácticamente retirado y que, aunque sigue siendo muy llamativo, tampoco tiene nada que decir en el show actual de los lunes noche. Es decir, es como si hubieran puesto un comercial en medio del show, pero bueno, son dos leyendas y el público reacciona ante ellas con gratitud y con respeto, aunque el segmento carezca de sentido.

De las palabras del Hunter, pues poco que destacar. Una promoción hablando de la grandeza y llamando la atención de los fans casuales. La forma de defender NXT y Summerslam estuvo bien y es lógico que él se vanaglorie de los eventos ofrecidos. No han estado mal, pero usar adjetivos tan grandilocuentes y decir que los fans están muy entusiasmados con lo visto durante el fin de semana quizás sea sobrevalorarse un poco. Por lo demás, pues me sorprendió que en el anuncio oficial dijeran que esta es la última ocasión en la que se enfrentarán. Es una estrategia promocional para vender, obviamente, pero puede ser como el “Once in a Lifetime” de Cena y The Rock, que nunca sabemos si lo van a olvidar de aquí a unos meses. Bueno, de hecho, ellos ya finalizaron una Era hace más de un lustro y siguen ahí… De todas formas, gran promo, la verdad.

Dean Ambrose vs. Dolph Ziggler.

Combate muy parecido al que mantuvieron Seth y Dolph la noche anterior, con menos duración e importancia, pero con una estructura similar. Ziggler comenzó huidizo y tratando de buscar trampas, rehuyendo el cara a cara directo y Ambrose mostró una versión mas técnica en estos primeros instantes. Sorprendió su tranquilidad y el control de la situación, superando a Dolph de manera clara. McIntyre, desde ringside, produjo distracciones que llevaron a que la contienda se igualase. Los despistes de Dean permitieron respirar a Ziggler, que tuvo el dominio de la lucha, pero sin dar la sensación de superioridad que tenía Ambrose previamente. Los ayudantes en las esquinas realizaron su papel, sin tener demasiado protagonismo, pero con piques e interferencias molestas hasta que, sobre el ring, Dean subió el ritmo y ganó con contundencia al ex-campeón intercontinental.

Es lógico que el lunático tenga una buena proyección y venza en su camino hacia posiciones estelares, pero las sensaciones de Ziggler e indirectamente de Drew no son las mejores. Han tenido buenas semanas y han demostrado estar a la altura de los faces, pero a la hora de la verdad, parece que no confían en ellos como para ser alternativas de Shield a largo plazo. Para mantener la historia los utilizarán durante el periodo de tiempo que los guionistas necesiten una contraparte heel, pero hubiera preferido una mayor continuidad en su bookeo y más poderío en sus actuaciones para que su status no fuera inferior al de Dean y Seth. Pero bueno, hay cosas positivas, como ver a Ambrose con más recursos de los que esperaba. Siempre los ha tenido, pero en su último run sus performances eran bastante repetitivas y limitadas. Ojalá siga teniendo este enfoque su personaje.

Curt Hawkins vs. Elias.

Segmento cómico de la semana en el cual ambos tuvieron una buena presencia y salieron beneficiados. Elias ganó sin dificultades ante un enemigo paupérrimo, pero tuvo exposición, consiguió reacciones negativas de la grada pese a no tener demasiados mimbres de los que tirar y salió victorioso de una parte del show en la que el público estuvo bastante metido. No supone una gran subida de status y parece que está condenado a no ascender por encima de un techo que ya parece haber tocado. Pero como personaje cómico, sigue teniendo un espacio. Al menos fue mejor su performance que la del PPV, en la que tuvo presencia, pero solo para encontrarse una guitarra rota y no hacer nada ni interactuar con nadie.

Hawkins, por su parte, tuvo un homenaje en forma de aplausos, actuando como local. La gente reconoció su trabajo y, dado su gimmick, ese cariño es a lo máximo a lo que puede aspirar, más aún sin ser un face claro, excepto en ocasiones puntuales como anoche en Nueva York. Sigue con su storyline de derrotas y, lógicamente, perdió una vez más, pero tuvo momentos de lucidez dentro del squash, en los cuales hasta se vino arriba. Dadas las circunstancias, para ser un segmento para desengrasar y poca importancia, bastante sacaron estos dos hombres y el ratito que ofrecieron, fue entretenido.

Titus WorldWide (Titus O´Neil y Apollo Crews) vs. Authors of Pain (Akam y Rezar).

Combate insulso de transición, con un público muerto y sin nada en juego que no sirve más que para rellenar el lowcard del show. AoP ganaron siendo bastante superiores, aunque con poca inteligencia. Son bestias poderosas y con gran ventaja física, pero cometieron muchos errores que daban ciertas ventajas a Apollo, que fue quien tuvo mayor tiempo de acción sobre el ring. Lentitud, faltas de coordinación, ataques mal posicionados y un montón de detalles que impidieron que el triunfo fuera mediante un squash rápido. Apollo y Titus tampoco ofrecieron demasiada resistencia, así que lo único que vimos fue un alargamiento de lo inevitable.

Una victoria que no supone ningún push relevante para Authors of Pain, pero al menos les da un triunfo necesario para, lo que se supone, debe ser el final de esta rivalidad de tan bajo perfil. La derrota de Titus WorldWide es correcta, ya que su objetivo es hacer lucir bien a sus rivales y ya tuvieron un momento en el pasado que no supieron aprovechar para transformarlo en algún logro reseñable para ellos. Un combate random, olvidable, frío y que a poca gente, por no decir a nadie, interesó.

Promo de Ronda Rousey y Stephanie McMahon.

Ejemplo de como sacar una storyline de la nada más absoluta. Se utilizaron todos los clichés posibles para generar simpatías y odios, y como promo extremando los caracteres de cada cual fue bien pensada. Sin embargo, eran obvios todos los pasos que se daban y parecía poco creíble. Stephanie queriendo llevarse todo el protagonismo inicial, forzando todo hasta el absurdo, esperando el agradecimiento del público por sus actitudes, su importancia y por lo bien que ha trabajado a Ronda como supuesto proyecto suyo. Es evidente que eso iba a generar rechazo, pero es un recurso demasiado fácil. Y Rousey, pues aprovechando todo lo posible para ganarse el favor del público. Desde desafiar a la autoridad de Stephanie, hasta defender como suya propia la revolución femenina, eso si, alabando a las demás wrestlers, invitándolas a subir a la misma altura que la jefa, atacando la poca profesionalidad de Lesnar, desligándose de sus ausencias y dando la impresión de ser la mejor persona del mundo queriendo mezclarse con las demás pese a su status.

Por usar todo lo que tenía a su alcance, hasta se centró en la figura de Natalya, un tema sensible para todos por la reciente pérdida de su padre. No sé, fue una promo aceptable, con buenas reacciones y bien ejecutada, pero con argumentos tan sencillos, tan obvios y llevados tan al extremo, que no me acabaron de convencer. Prefiero las historias más profundas, elaboradas y en las que te puedas poner de parte del personaje porque te guste como actúa, no por obligación y usando la sensiblería de una manera tan excesiva. La sumisión final, pues bueno, para contentar a los fans y que el bien gane al mal (aunque atacar de ese modo fue un pelín heel).

Scott Dawson vs. Bo Dallas.

Aburrido combate en el que la grada estuvo más pendiente de hacer la ola y entretenerse con otras cosas que de la performance que se veía sobre el ring. El planteamiento fue muy básico. La mitad de los campeones por pareja contra la mitad de los últimos retadores en un uno contra uno clásico. Dominio del heel, recuperación del face con momentos más fluidos, aumentando el ritmo y la intensidad y pérdida de control para que el heel gane de forma limpia, demostrando que los campeones no dejan de ser unos tipos con suerte y que sin las artimañas propias de una lucha por parejas, se vuelven muy vulnerables y fáciles de derrotar.

No se vió nada espectacular, nada que avanzase en la rivalidad y la división tag de Raw volvió a dejar patente su decadencia, con una afición a la que no le importa lo que sucede sobre la lona y unos wrestlers desaprovechados, desmotivados y que no lucen como deberían por potencial, debido al abandono creativo y de lógica que hay en este sector del show. No es necesario igualar status y nivelar la situación, sino dar un giro radical, dejar de realizar apuestas extrañas y asegurar la calidad, dando a cada uno el lugar que se merece, en vez de obcecarse en una situación que se mantiene estática y lo que provoca es que cada vez se convierta el problema en algo más grave, de lo que puede costar más salir.

Dash Wilder vs. Curtis Axel.

Había pensado en copiar y pegar lo mismo que he escrito en la lucha anterior, porque la situación es exactamente la misma, el desarrollo de la lucha similar, por mucho que Axel actuase buscando venganza y comenzara con mayor fuerza que Dallas y porque el resultado vuelve a incidir en lo mismo. Obviamente, haciendo cosas iguales, es difícil esperar una reacción diferente, así que tuvimos más de lo mismo y la sensación de relleno se alargó aún más. Luego revitalizarán la división cuando convenga con el equipo de Ziggler y McIntyre, con Shield, o como ya hicieron con Wyatt y Hardy, uniendo a hombres llamativos que ni conforman un conjunto real entre ellos. Pero teniendo buenas parejas como Revival o Authors of Pain, es increíble que la situación haya degenerado tanto hasta convertir los segmentos de los campeones en los puntos más bajos del show, totalmente devaluados. Ni siquiera las promos son llamativas. Ni graciosas, ni emotivas, ni irónicas...

Campeonato Universal.

Roman Reigns (c) vs. Finn Bálor.

Muy buen combate entre dos hombres muy diferentes, pero que compaginaron bien sus estilos. Reigns sacó a relucir su versión más contundente, tranquilo y pausado, pero sabedor de que en el cuerpo a cuerpo, su físico era superior y su contundencia le daba una gran ventaja. Finn, por su parte, buscó las armas más efectivas para hacer frente al samoano, es decir, llaveo para tener el control y evitar los golpes poderosos de Roman, tratando de coger distancia para aplicar movimientos aéreos sin que el campeón pudiera cazarlo. Con velocidad, con valentía y con intensidad, el irlandés consiguió igualar las fuerzas, entre los aplausos de un público totalmente volcado con él.

La lucha estaba siendo entretenida, con Reigns muy seguro de sí mismo, pero que no podía sujetar completamente el vendaval que Bálor era por momentos, con constancia y ataques continuos sin recibir los golpes duros que si que le hubieran supuesto gran ventaja a Reigns. La contienda fue cogiendo más ritmo y se estaba convirtiendo en un gran main event, hasta el momento en el que apareció Braun como factor decisivo con el maletín en la mano. En un primer momento, despistó a Roman, por lo que Finn aprovechó la situación y con un slingblade, seguido de una doble patada, lo dejó perfecto para ser rematado. Sin embargo, Roman se rehizo, gran lanza y victoria clara, en un gran combate.

A partir de ahí, llegó el post-match, en el que Strowman decidió canjear, pero antes de sonar la campana para dar inicio a la lucha frente a un maltrecho Reigns, sus hermanos de The Shield evitaron el canjeo (Strowman mantiene el maletín, por tanto) y golpearon severamente a Braun, finalizando con la triple powerbomb sobre la mesa, una vez que Roman se repuso. Lo mejor de todo, la gran reacción de la gente y la importancia a Ambrose y Rollins, además de la espectacularidad del momento. Lo peor, pues que es un recurso demasiado trillado, muy visto y que no dejan que pase un tiempo sin reunificarlos de nuevo, lo que puede llegar a cansar. Además, también existe la sensación de que el objetivo de esta reunión es proteger a Roman de los abucheos lo cual, a la larga, no es muy beneficioso que digamos. Por cierto, hay sobresaturación de faces en Raw, que los cinco luchadores del último segmento son los más over y ninguno es heel, de momento.

Nota del show: 6,5

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